Radiografía dental en gatos: el examen que revela lo que no se ve a simple vista
La salud dental de los gatos suele pasar desapercibida, incluso para los tutores más atentos. Esto se debe a que muchas enfermedades orales felinas se desarrollan “a puerta cerrada”, bajo la línea de las encías, sin mostrar signos evidentes en etapas iniciales. En este contexto, la radiografía dental se ha convertido en una herramienta indispensable para detectar y tratar estas patologías a tiempo.
Nuestro equipo
En Centro Veterinario Imagenvet contamos con especialistas en cada área para asegurar que este procedimiento sea realizado de la mejor forma posible.
Para la realización de este procedimiento contamos con Claudio Almeyda, José Ignacio Escudero y Ricardo Silva, Médicos Veterinarios con dedicación exclusiva al área de Imagenología Veterinaria. Su labor principal consiste en asegurar una calidad de Imagen optima, con el objetivo de garantizar un diagnóstico preciso y confiable por parte de los Médicos Veterinarios.
Además, durante el procedimiento el paciente es acompañado por nuestra anestesista Paulina Medina, quien garantiza que el protocolo anestésico este pensado en las particularidades de cada paciente y que este sea monitorizado durante todo el procedimiento.
Todo esto es posible gracias a la adquisición de un equipo radiográfico dental.
¿Qué es una radiografía dental y por qué es tan importante en gatos?
Las radiografías dentales son imágenes tomadas con equipos de alta precisión que permiten visualizar las estructuras internas de los dientes y huesos mandibulares y maxilares. En los gatos, este examen es fundamental porque más del 60% de las enfermedades dentales no son visibles clínicamente sin imágenes intraorales.
Gracias a estas radiografías, es posible observar lesiones ocultas, evaluar la salud de las raíces y detectar cambios óseos que no se aprecian durante un examen bucal estándar.
¿Qué enfermedades dentales felinas se diagnostican con mayor frecuencia?
La radiografía dental ayuda a identificar patologías que son muy comunes en gatos y que suelen cursar con dolor, aunque ellos rara vez lo manifiesten. Entre las más frecuentes destacan:
- Lesiones resortivas dentales (antes llamadas lesiones odontoclásticas), extremadamente comunes en felinos.
- Periodontitis, que afecta los tejidos de soporte del diente.
- Dientes fracturados, incluso cuando la corona se ve normal.
- Dientes retenidos o mal posicionados.
- Alteraciones del hueso alveolar asociadas a inflamación o infección.
Sin estas imágenes, muchas de estas condiciones pasarían inadvertidas durante años.
¿Cómo se realiza la radiografía dental en gatos?
Para obtener imágenes precisas y sin movimiento, los gatos requieren anestesia general segura y controlada. Esto permite posicionar correctamente el sensor intraoral y proteger al paciente del estrés. Durante el procedimiento, el equipo veterinario toma distintas proyecciones que permiten evaluar cada pieza dental en detalle.
¿Qué beneficios aporta este examen?
- Diagnósticos más precisos y tempranos.
- Planificación segura de extracciones dentales.
- Detección de patologías dolorosas que no dan señales externas.
- Mejor pronóstico y calidad de vida para el paciente.
- Seguimiento de tratamientos dentales complejos.
En gatos con antecedentes de lesiones resortivas o enfermedad periodontal, incorporar radiografías dentales de forma rutinaria es clave.
Conclusión
Aunque los gatos tienden a ocultar el dolor, su salud dental no debería ser un misterio. La radiografía dental permite al equipo veterinario ver más allá de lo visible, detectar problemas a tiempo y ofrecer tratamientos eficaces y compasivos. Invertir en este examen es apostar por el bienestar integral de tu gato y prevenir complicaciones que afectan su calidad de vida.
